Primero la alcaldesa solicitó el ERTE argumetando causas económicas. Cuando la Junta le pide las cuentas del ayuntamiento de los tres últimos años y las medidas de ahorro económico que se hayan tomado en ese tiempo para contener el gasto y equilibrar los presupuestos sale con que es un ERTE por causas organizativas. O sea que se cambia de caballo en plena carrera.
Ahora que le piden la RPT y le dan 5 días para remitir la documentación. ¿Qué han hecho? ¿Se la habrán inventado? Porque la RPT no estaba hecha hace cinco días.
Si este documento no ha sido entregado la Junta entenderá que el ayuntamiento desiste de poner en marcha el ERTE. Sin embargo la alcaldesa dice que el ERTE sigue adelante a pesar de que hay muchos intereses en que no salga. ¿De quién o quiénes? ¿No será que son unos auténticos incompetentes que se han apresurado a hacer algo de lo que no tenía ni idea?
La alcaldesa manda un comunicado a los trabajadores y lo primero que les dice es que la adhesión por parte de los trabajadores es voluntaria. La Inspección de Trabajo dice que el ERTE no puede ser voluntario y que hay que especificar los servicios, áreas y trabajadores afectados.
Además desde este mismo organismo se insiste que después de analizar la documentación en realidad se trata de un ERTE por causas económicas para reducir el gasto público. Argumento económico que sólo será viable en la medida en que se agoten todas las medidas previstas en la legislación vigente, desde la cooperación económica de otros órganos de la administración hasta la dispensa de la obligación de determinados servicios.
En definitiva la Junta no tiene claro cuál es el argumento que origina el ERTE. Pero lo que sí tiene claro es que no se argumentan ni exponen justificaciones suficientes ni para la causa organizativa ni para la económica.
Y por si fuera poco, la alcaldesa segura a la Junta que el ERTE cuenta con el apoyo de todos los sindicatos cuando a la vista está que no es verdad.
La alcaldesa sigue negando la mayor e intenta que el ERTE siga adelante como si en ello le fuera la vida. Política por supuesto.
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