¡Que me diga la alcaldesa si con mis 700 euros ha podido pagar la deuda municipal!
Estas palabras fueron pronunciadas a los medios de comunicación por Iván, uno de los encerrados en la catedral por los despidos de Pilar Sánchez alcaldesa del PSOE.
Iván desgranó algunos episodios de su vida ante los medios allí presentes. Cobraba 700 euros porque el resto de su trabajo era en beneficio de la comunidad. Era un acuerdo que el anterior delegado de educación Antonio Sánchez había alcanzado con el juez encargado de las causas pendientes contra este muchacho, que ciertamente ha tenido una vida pero que muy dura. Tan dura que algunos episodios de la misma se hacen difícilmente soportables.
Este chaval es uno de los trabajadores que doña Pilar Sánchez la cruel ha puesto de patitas en la calle. "Este trabajo me permitía tener una vida digna y separarme de las malas juntas y ahora Pilar Sánchez me ha arrojado a los tiburones" .
Iván está en la calle, sin trabajo. Encerrado en el único sitio donde ni siquiera el largo brazo vengativo de Doña Pilar Sánchez puede llegar. No sé muy bien si el tiempo juega a su favor o en su contra pero a los encerrados les deseo que resistan todo lo que puedan. A lo mejor en ese partido que se llama obrero hay algún político con algo más de cordura y sobre todo con algo más de corazón que esta auténtica descerebrada que sólo piensa en sí misma.
Las mentiras de doña Pilar van cayendo una tras otra. ¿21 despedidos para pagar la deuda minicipal? ¿con eso basta? ¿Y por qué estos y no otros como el sobrino del Consejero de Turismo de la Junta, o el hijo del director de infraestructuras y destacado miembro del PSOE? Estas son algunas de las preguntas que se hacían los encerrados y que ahora nos hacemos todos.
jueves, 17 de enero de 2008
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