lunes, 19 de septiembre de 2011

LO de Onda Heré

NO lo tengo claro. LLevan razón quienes dicen que 83 en la plantilla son muchos. Pero también hay muchos en otros sitios.

Y a estos muchos de Onda Herá supongo que los habrá contratado alguien como a otros muchos de algunos otros muchos sitios.

Y qué responsabilidad se les pide a quienes contrataron a estos muchos.

No vale sólo poner en la picota a la mitad de los muchos. También sería bueno aclarar cuántos de esos muchos contrataron los tres que han gobernado hasta la fecha. ¿Y si habían muchos por qué los contrataron? ¿Antes eran necesarios y ahora no?

Cualquiera sabe. ¿Entraron algunos con Pelayo de alcaldesa? ¿Y si es así seguirán esos o también irán a la calle?

Muchas dudas. La única que no me alberga es que si yo estuviera en la piel de alguno de esos 83 estaría haciendo lo que hacen ellos.

Si hay que despedir a uno sólo también habría que correr a gorrazos a los tres que han gobernado hasta la fecha. Bien es cierto que a unos más que a otros.

La ruina del ayuntamiento no la provocaron los de onda heré. La provocaron los que gobernaban. Y curiosamente esos tres siguen en el ayuntmaiento.

Podría entender que un alcalde nuevo pusiera pie en pared ¿pero los que ya gobernaron y no hicieron alarde de austeridad en su momento?
Pues la verdad es que me chirría.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Se comenta que en época de Pelayo entraron diez personas en onda jeré
concretamente en el año 2003, si es cierto o no, el Pepe el Largo y los Saboridos lo tienen que saber, segun se comenta por los mentideros municipales de los 300 y pico que entraron en tiempos de la pelayo, solo 7 pertenecian al P.P. y Pilar los intentó echar pero no pudo, este caso que comento está recogido en la prensa, quiere eso decir que a la Pelayo los Pachequistas de entonces, que no se si lo seguiran siendo ahora le colaron el resto hasta los 300.


Francisco González Lagaña.-

Anónimo dijo...

Difícil creer. Será cierto o no. Pero difícil creer. 7 del PP, 293 de Pacheco. Ni Pacheco es tan listo ni la otra tan torpe.

La de las calzas verdes