La plantilla de los autobuses amenaza con ponerse en huelga. Un mes ha durado la tranquilidad, justo el tiempo que lleva la nueva empresa. Está claro que el problema no era el color de los autobuses.
Los Amarillos dicen lo mismo que decían los Rosas. Que mientras el ayuntamiento no les pague ellos no pueden pagar a la plantilla. Total nueva patada hacia adelante en un tema recurrente, la falta de pago por parte del ayuntamiento.
Si esto sigue así ¿cuál será el nuevo color de los autobuses de Jerez, el de Guatepeor?
Otros que no las tienen consigo son los trabajdores del Villamarta. Aún no han cobrado la nómina de noviembre. Los trabajdores de la fundación dicen que al igual que ocurrió en octubre este mes también se han olivdado de ellos y que la delegada de turno Ainoha Gil había dicho que todos los trabajadores iban a cobrar, cosa que no ha sucedido evidentemente.
La propuesta que hacen los trabajadores no me parece mal, que se reparta el dinero que haya de forma equitativa hasta que se complete el segundo pago para cerrar la totalidad.
"Trato discriminatorio e injusto con los que no han mostrado su protesta de forma pública y notoria". Vaya, pues a lo mejor va a ser por eso.
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