No creo que fuera el momento para ponerse a reivindicar o pedir, el alumbrado navideño. Pero quién soy yo para decirles a estas personas cuál es el momento adecuado y cuál no.
Es lo que suele ocurrir cuando se le pierde el respeto al pueblo, que el pueblo termina perdiéndotelo a ti.
Se le pierde el respeto a los ciudadanos cuando se les dice cualquier cosa para torear el momento, cuando se les engaña, cuando se les dan falsas esperanzas y cuando se les miente con una sonrisa o sin ella.
Quienes están pasándolo mal terminan por agotar el estado de tensión en el que están y explotan. Y cuando esto ocurre pierden el pudor, el respeto y el miedo. Entonces de nada sirve que les hables porque no te creen y de nada sirve esconderse porque siempre te encuentran. Si no es hoy lo harán mañana.
Exaltados, efectivamente como dice el PSOE. Exaltados que no tienen sus viviendas, que no cobran ya el paro y que no tienen lo que otros afortunadamente tenemos.
1 comentario:
Lo malo no es solamente perderle el respeto al pueblo soberano,lo peor es perder la verguenza. Era verde y se la comió un burro.
Verguenza me daría ser además embustero compulsivo....
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